Van a dejar de rompernos los ovarios en algún momento de nuestra vida? 😫
Menstruar parece ser razón suficiente para que la sociedad te rompa los ovarios. Subite morocha! Hoy te llevamos por un paseo en el que recopilamos todos los tabúes de la menstruación en los distintos momentos de tu vida👇
🩸TU PRIMERA MENSTRUACIÓN: es considerada por la sociedad actual como un momento de crecimiento y de cambio. Muchas veces asociado erróneamente a la madurez sexual.
“Te hiciste señorita” ❌ No, tan solo soy una niña que tiene una infancia y una adolescencia por transitar.
“Ojito con los chicos” ❌ Qué parte no entendiste de que SOY UNA NIÑA?
Te viene por primera vez y todos te festejan. Están celebrando que, finalmente podrás cumplir el rol que todo cuerpo menstruante debe tener en una sociedad con un mandato establecido, el de la maternidad. Tu primer sangrado parece ser de público conocimiento y opinión, pero las menstruaciones sucesivas las tenés que vivir en la intimidad de tu baño.
🩸EDAD FÉRTIL: Ya sos una adulta. Llegó tu momento de definirte como mujer. Ahora te toca ser mamá.
📣TIC TAC⏰ Dice tu reloj biológico.
📣 “¿Y LOS HIJOS PARA CUANDO? Dale que se te pasa el tren“
¿Qué pasa con las que no queremos ser madres? ¿Qué pasa con lxs que quieren ser madres y no menstrúan?
❌Ser madre debería ser una opción, no una obligación. Basta de juzgar, estigmatizar y presionar a aquellas que deciden o no pueden maternar.
❌Nuestra identidad va mucho más allá de maternar o no maternar. Ser biológicamente aptas para gestar no significa que debamos hacerlo, ni que ese sea nuestro destino inexorable.
🩸MENOPAUSIA: Marca el fin de la objetivación sexual patriarcal. Ya estás vieja. Tu belleza y sexualidad, se acabaron. A tu reloj biológico se le acabaron las pilas. El tren ya pasó.
La connotación negativa de la menopausia está asociada a la edad, a la incapacidad de reproducirte (¿¡CÓMO QUE NO FUISTE MADRE?!) y, a la triste visión que gran parte de la sociedad tiene de las mujeres: tienen que ser máquinas sexuales y reproductivas.
💖Desde niñas, durante la adultez y en nuestra menopausia, las presiones contradictorias recaen sobre nuestros cuerpos y nuestras mentes. Somos una comunidad que sangra y esto no debería ser ningún secreto.